Cagliostro, el masón infame

 Giuseppe Balsamo, más conocido como Alessandro Cagliostro, fue un aventurero y alquimista italiano que se convirtió en una figura controvertida en la Europa del siglo XVIII.

Cagliostro nació en Palermo, Italia, en 1743. Desde muy joven, mostró un gran interés por la magia y la alquimia. En 1772, se trasladó a Roma, donde se convirtió en un líder de la masonería.

Cagliostro fue un maestro de la autopromoción y pronto se ganó una reputación como un hombre de gran poder y sabiduría. En 1785, se involucró en el caso del collar de la reina, un escándalo que lo llevó a prisión.

En 1785, la condesa de La Motte, una mujer ambiciosa, convenció a Cagliostro de que podía ayudarla a recuperar un collar de diamantes que había sido robado a la reina María Antonieta. Cagliostro afirmó que podía hacer que el collar apareciera mágicamente, pero en realidad se lo había vendido a un joyero.

El caso del collar de la reina se convirtió en un escándalo nacional. Cagliostro fue acusado de estafa y fue encarcelado en la prisión de la Bastilla.

Cagliostro fue juzgado por un tribunal especial en 1786. Fue declarado culpable de estafa y fue condenado a prisión perpetua. Sin embargo, fue liberado en 1791, tras el estallido de la Revolución Francesa.

Después de su liberación, Cagliostro viajó por Europa, tratando de recuperar su reputación. Sin embargo, nunca pudo superar su condena por el caso del collar de la reina.

Cagliostro murió en Roma en 1795. Su muerte fue un misterio, ya que algunos creen que fue envenenado.

Cagliostro era un miembro activo de la masonería. Se unió a la masonería en Roma en 1772 y rápidamente se convirtió en un líder de la fraternidad.

Cagliostro utilizó su posición en la masonería para promover sus propias ideas y creencias. Creía en la alquimia y la magia, y a menudo utilizaba sus rituales masónicos para realizar experimentos.

La participación de Cagliostro en la masonería fue controvertida. Algunos masones creían que sus creencias eran demasiado extravagantes, mientras que otros opinaban que estaba utilizando la fraternidad para su propio beneficio personal.

Cagliostro es una figura controvertida, pero su legado sigue siendo importante en la historia de la masonería. Fue un maestro de la autopromoción y ayudó a popularizar la fraternidad en Europa.

Cagliostro también fue un precursor del ocultismo y la magia. Sus creencias y prácticas influyeron en muchos otros, incluidos los fundadores del movimiento esotérico del siglo XIX.